Parece mentira que una masía catalana de la Costa Brava rodeada de vegetación en medio de la nada, pueda convertirse en una de las experiencias sensoriales más interesantes que hayas experimentado.
El pasado sábado tuve el placer de cenar en el restaurante Els Tinars, un referente reconocido en la gastronomía española con una estrella michelín, regentado por la tercera generación de la familia Gascons. Tenía muchas ganas de probarlo y cumplió con mis expectativas.
La sensación que tuve al llegar al aparcamiento fue de un lugar especial, selecto y singular.
Una vez dentro, me sorprendió el salón amplio y elegante lleno de comensales. Nos sentamos al lado de la ventana, en un espacio más íntimo, muy agradable. El servicio destaca por su clase y discreción.
Habíamos pedido un menú degustación y parece que no lo tenían bien anotado y nos ofrecieron directamente la carta. Rectificaron y nos trajeron el menú. El menú degustación es un libro de experiencias sensoriales de unas 3 horas de duración.
Si no eres de comer en exceso por las noches, te recomiendo que lo encargues para mediodía. Es una opción interesante para conocer la variedad de platos y mezclas en un restaurante de tal envergadura.
Me gustó mucho la combinación de cocina tradicional y moderna.
Durante toda la velada sentí que estaba probando producto de temporada y de la tierra, Costa Brava Moments pensé.
La sencillez y simplicidad de productos como los guisantes combinado con todos los sabores de un buen bacalao junto con el toque aromático de la trufa negra Melanosporum nos transportan al Empordá. En definitiva, un festín de sabores, aromas y texturas.
Los postres no me entusiasmaron. Lo que sí me llamó la atención fue el de mandarina ecológica, frutas de la pasión y chocolate blanco.
Lo que más me gustó
Lo que menos me gustó
Yo repetiré. Así que con eso te lo digo todo.
¿Qué opinión tienes tú de els Tinars?